
El banco de los Pacers fue la clave del triunfo al aportar un total de 49 puntos contra solo 18 de su rival.
Los sorprendentes Indiana Pacers, el equipo revelación de los playoffs, derrotaron por 116-107 a los Oklahoma City Thunder y lideran 2-1 las Finales de la NBA.
El equipo comandado por Tyrese Haliburton se levantó de la rotunda derrota del domingo con el empuje de su público y se quedó con el partido ante los mejores de la temporada regular.

El aliento de los fanáticos fue clave y en todo momento se vio un estadio encendido, que recibía a las finales de la NBA por primera vez en 25 años. “Amamos jugar delante de nuestra gente”, agradeció Haliburton.
“Nos encanta estar aquí. Se merecen un básquetbol de alto nivel y de alto riesgo, y eso es lo que les estamos dando ahora mismo”, dijo el base sobre un público ansioso por conseguir el primer anillo de campeón de su historia.

Este miércoles Haliburton ofreció su primera gran actuación de las Finales al convertir 22 puntos, 9 rebotes y 11 asistencias y contribuir a que el resto de las figuras locales entregara su mejor versión.
El alapivote Pascal Siakam logró 21 puntos y el pivote Myles Turner anotó otros 9 y colocó 5 tapones, aunque el máximo anotador de la noche fue el joven alero suplente Bennedict Mathurin, que llegó a 27 tantos.
El banco de los Pacers fue la clave del triunfo al aportar un total de 49 puntos, mientras que su rival solo convirtió 18.
Shai Gilgeous-Alexander, el líder de los Thunder, terminó con 24 puntos, 8 rebotes y 4 asistencias. El base canadiense, Jugador Más Valioso (MVP) de la temporada, no pudo imponer esta vez su dominio en un partido muy igualado que se decidió con un acelerón de los Pacers a pocos minutos del final.

Shai sufrió ante la intensa y física defensa de Indiana, especialmente en el último cuarto, y terminó con 24 puntos (9 de 20 en tiros), 8 rebotes, 4 asistencias y 3 tapones. Además, tuvo 6 pérdidas, la mayor cifra en su carrera en ‘playoff’.
“Parecía como si (en el último periodo) ganaran todas las pelotas divididas. Ejecutaron bien en ambos lados de la cancha. Cuando cedes esas dos cosas, sin importar el cuarto, probablemente vas a perder ese cuarto. Todo gira en torno a eso, especialmente cuando juegas fuera de casa, en un ambiente hostil y con su público apoyándolos a ellos”, señaló.
El próximo partido también se jugará en Indiana el próximo viernes, desde las 21:00 (horario argentino), con transmisión de ESPN.