La medida de fuerza comenzó a las siete de la mañana y continuará hasta mañana. El hospital funcionará al mínimo de sus capacidades.
Los médicos del hospital Garrahan realizan un paro de 24 horas para reclamar una mesa paritaria con el Ministerio de Salud.
La medida de fuerza comenzó a las siete de la mañana de este miércoles y continuará hasta este jueves a la misma hora.
El hospital funcionará al mínimo de sus capacidades. Solo se atenderán urgencias y emergencias, y aquellos turnos que no se puedan reprogramar por razones de fuerza mayor.
Los trabajadores del Garrahan reclaman que en la próxima reunión paritaria -que será el próximo lunes- haya una propuesta económica por parte del Ministerio de Salud.
El objetivo es que ningún trabajador del centro de salud gane por debajo de los $1.800.000, es decir, por debajo de la canasta básica.
La jornada comenzó a las siete de la mañana con una radio abierta y continuará con un festival durante todo este miércoles. El paro terminará a primera hora de mañana.
Mariela Cestini, kinesióloga del Garrahan, contó que hace cinco años trabaja en el centro de salud, que primero fue contratada y que ahora trabaja como planta permanente.
“Tenemos 42 horas de trabajo semanal, más una guardia de 24 horas o de 20 en su defecto“, detalló sobre las condiciones del trabajo.
Y brindó detalles sobre los médicos que trabajan contratados: “Tienen una renovación cada 3 meses y al año la evaluación. Cada 3 meses estás esperando el mail para ver si siguen trabajando”.
En ese contexto, se refirió a la situación económica: “El sueldo está muy por debajo de lo que está un kinesiólogo de cualquier otro lugar”.
“Es muy complicado llegar a fin de mes, sumado que la gran mayoría de médicos cada tres meses no saben si van a seguir”, agregó.
Miguel, también kinesiólogo del Garrahan, dijo que todavía no hay propuestas oficiales por parte del Ministerio de Salud. “Estamos pendientes de lo que va a pasar”, señaló.
“Cada vez renuncia más gente. De 180 renuncias pasamos a 210 y cada vez son más. Son profesionales que se van a otros lugares donde les ofrecen mejores sueldos”, detalló.
A su vez, remarcó que las renuncias les afectan a los médicos que se quedan en el Garrahan: “Esto se siente en el trabajo diario y en las guardias porque es un profesional menos para muchos pacientes”.
En esa misma línea, agregó: “Además, nosotros necesitamos gente de alta calidad porque tratamos casos muy complejos”.
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