
El dictador viajó a la ciudad portuaria de Chongjin, donde fue testigo del hecho y apuntó contra los responsables. La agencia estatal KCNA dijo que se trató de un “grave accidente”
Un grave accidente ocurrió en la ceremonia de botadura de un nuevo destructor naval de Corea del Norte, afirmó el jueves la prensa estatal del país, cuyo líder Kim Jong Un habló de un “acto criminal”.
En la ceremonia del miércoles para presentar el nuevo buque de 5.000 toneladas “ocurrió un grave accidente” debido a “un comando inexperto y negligencia operativa”, reportó la agencia de prensa KCNA.
Los “errores irresponsables” de los oficiales al mando “se abordarán en la reunión plenaria del Comité Central del Partido del próximo mes”, agregó.
Cómo fue el accidente
El hermético país comunista, sujeto a sanciones de la ONU por su programa armamentístico y nuclear, ya presentó otro destructor de 5.000 toneladas el mes pasado.

En esa ocasión, los medios estatales distribuyeron imágenes de la ceremonia con Kim y su hija Ju Ae, considerada por numerosos expertos como su probable sucesora.
Corea del Norte aseguró que el buque iba equipado con “las armas más poderosas” y que estaría listo “para entrar en acción a principios del próximo año”.
Algunos analistas apuntaron que el barco puede estar equipado con misiles nucleares tácticos de corto alcance, aunque Pyongyang todavía no ha demostrado su capacidad de miniaturizar sus ojivas.
Según el ejército surcoreano, ese destructor podría haberse desarrollado con ayuda de Rusia a cambio del despliegue de miles de soldados norcoreanos en la guerra contra Ucrania.
En los últimos años, Kim ha llamado a modernizar las fuerzas armadas de Corea del Norte, incluyendo su flota naval.

En marzo visitó las instalaciones donde están presumiblemente construyendo un submarino propulsado por energía nuclear que, en sus palabras, impulsará “radicalmente” su marina de guerra.
Previamente, Pyongyang también aseguró que estaba desarrollando drones submarinos con capacidad nuclear capaces de provocar “un tsunami radioactivo”, aunque los analistas dudan de que realmente disponga de un arma así.
Según la fuente, un fallo en el desplazamiento sincronizado de las plataformas de lanzamiento provocó que la sección de popa del destructor de 5.000 toneladas se soltara antes de tiempo y quedara atascada, lo que causó daños estructurales en la base del buque e impidió que la proa fuera liberada adecuadamente.
“Se produjo un grave accidente en el que la sección de proa no pudo ser liberada debido al atasco en la popa”, explicó la KCNA.
El líder norcoreano responsabilizó directamente a varios organismos clave, entre ellos el Departamento de la Industria de Municiones del Comité Central del Partido de los Trabajadores.
El coronel Lee Sung-joon, portavoz del Estado Mayor Conjunto surcoreano (JCS), señaló en rueda de prensa que las agencias de inteligencia de Corea del Sur y EE.UU. ya estaban siguiendo de cerca la actividad en el astillero de Cheongjin y consideraron que el intento de botadura lateral había fracasado.

La información también fue publicada este jueves en la portada del diario oficial norcoreano Rodong Sinmun. Lee recordó que Corea del Norte ha revelado previamente otros fallos técnicos, como los relacionados con el lanzamiento de satélites militares, aunque no es lo más común.
Pruebas de misiles
Este mismo jueves, Corea del Norte disparó varios misiles de crucero hacia el mar de Japón (conocido como mar del Este en las dos Coreas), según el JCS.
El ejército surcoreano detectó los lanzamientos alrededor de las 09:00 hora local (00:00 GMT) desde la zona de Seondeok, en la provincia de Hamgyong del Sur.
Aunque no se especificó el número ni el tipo exacto de proyectiles, las autoridades confirmaron que se trató de “varios misiles de crucero”, y que sus características técnicas están siendo analizadas conjuntamente con las agencias de inteligencia de Estados Unidos.
En cuanto al buque accidentado hoy, las autoridades surcoreanas creen que es del mismo tipo que el destructor Choe Hyon presentado por el Norte el mes pasado, y que actualmente sigue volcado en el mar tras el fallido intento de botadura.
Este tipo de reconocimiento público de fallos técnicos o administrativos por parte de Corea del Norte es inusual, dado que el régimen suele ocultar incidentes que puedan interpretarse como señales de debilidad o incompetencia, especialmente en sectores estratégicos como el militar.