Real Madrid se terminó quedando con un inmejorable clásico ante Barcelona, en un partido que tuvo de todo y que prácticamente le deja La Liga en bandeja a falta de seis fechas por jugar.
El Merengue remontó un encuentro que ya se le presentó adverso desde el comienzo, cuando Andreas Christensen aprovechó un error de Lunin a los 6′ y abrió el marcador para los culés en el Bernabéu.
Pero los de Ancelotti apenas tardaron 12′ en encontrar la igualdad con Vinícius, que aprovechó una discutida falta en el área de los visitantes sobre Lucas Vázquez para cambiarla por gol. Un 1-1 rápido que empujaba al Merengue a ir por más.
La primera mitad se iría en igualdad, pero no exenta de más discusiones, porque hubo una conquista de Lamine Yamal que todo el Barça festejó y que el VAR y el árbitro consideraron que no había entrado en su totalidad. El juvenil conectó un centro de Raphinha al primer palo con un tacazo que Lunin salvó de milagro, pero que sumada al penal de Vázquez en la primera mitad, hicieron explotar al Barcelona. Y hasta allí iría la primera mitad.
Ya en el complemento, fueron los culés nuevamente los que se pondrían en ventaja. Un tiro de Lamal fue desviado por Lunin, y en el rebote Fermín López corrigió para el 2-1. Parecía que los de Xavi se encaminaban en el partido.
Pero el Merengue jugaría unos últimos veinte minutos para el recuerdo. Primero Vini volvería aparecer con un gran centro que encontró a Lucas Vázquez para el 2-2. Y sobre el final, Jude Bellingham -después de meses sin convertir- se vestiría de héroe para el 3-2 a los 91′.
El triunfo del Madrid termina casi que sentencia La Liga, dándole una ventaja de 11 puntos al Merengue sobre el Barcelona a falta de 18 por jugar.