La intoxicación por plomo afecta a dos tercios de la población mexicana, siendo los menores de cinco años los más vulnerables.
La controversia sobre la presencia de plomo en los termos Stanley ha generado inquietud entre los usuarios diarios de estos populares recipientes. La empresa fabricante, Pacific Market International, confirmó que, de hecho, sus termos contienen plomo. Esta revelación ha generado un revuelo en las redes sociales, ya que plantea preocupaciones sobre los posibles riesgos para la salud. Sin embargo, en México, la exposición al plomo a través de ollas de barro puede ser aún más preocupante.
Pacific Market International, conocida por sus emblemáticos termos Stanley, ha experimentado un cambio en su estrategia de negocio en la última década, orientándose hacia el público joven y adoptando una estética asociada a estilos de vida saludables y amigables con el medio ambiente. Sin embargo, recientemente se confirmó que sus termos contienen plomo, según reveló un vocero de la empresa. Aunque este metal tóxico está presente en el proceso de fabricación, se asegura que queda aislado después de cubrirse con una capa de acero inoxidable, evitando así el contacto directo con los usuarios finales o los líquidos almacenados.
La compañía #Stanley ha elevado sus ventas gracias a su termo Quencher, que se ha viralizado en redes socialespic.twitter.com/GX12aUxEjK
— EL CEO (@elceo__) February 1, 2024
En México, donde el uso de ollas de barro es común, la preocupación por la exposición al plomo es aún más relevante. La Norma Oficial Mexicana NOM-199-SSA1-2000 establece que la alfarería vidriada utilizada para la preparación y almacenamiento de alimentos es la principal fuente de exposición al plomo en el país para la población no ocupacionalmente expuesta.
La loza de barro vidriado, tan arraigada en las tradiciones mexicanas, utiliza esmaltes que contienen óxido de plomo y sílice, conocidos como «greta». Cuando estos utensilios se exponen a líquidos calientes o se utilizan para cocinar, el plomo se libera, contaminando los alimentos y bebidas. La Secretaría de Salud advierte que estos esmaltes perjudican tanto a los artesanos que los trabajan como a quienes consumen productos almacenados, cocidos o servidos en utensilios que los contienen.
La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2018-2019 indicó que el 50% de los casos de intoxicación por plomo en niños de uno a cuatro años en México se relaciona con el uso de utensilios de barro durante más de tres meses. La intoxicación por plomo afecta a dos tercios de la población mexicana, siendo los menores de cinco años los más vulnerables.
A pesar de que los utensilios de barro contribuyen al 33.33% de los casos de intoxicación, la principal fuente de exposición sigue siendo el medio ambiente. Sin embargo, la magnitud del problema no debe subestimarse, y es esencial abordar tanto la exposición derivada de productos como los termos Stanley como la relacionada con las tradicionales ollas de barro para proteger la salud pública en México y en todo el mundo.