La líder opositora confirmó que se encuentra en Venezuela y aseguró que los resultados de las elecciones del pasado 28 de julio representan un “descalabro del chavismo, no solo como un movimiento político, sino también como una estructura de control social”
La líder opositora de Venezuela María Corina Machado desmintió este miércoles las afirmaciones del régimen de Nicolás Maduro, que aseguraba que ella había abandonado el país y se encontraba en España.
En una entrevista concedida a EVTV, Machado confirmó que “los venezolanos saben que estoy aquí en Venezuela, la gente lo sabe y Nicolás Maduro también lo sabe. Lo que pasa es que están desesperados por saber dónde estoy, y yo no les voy a dar ese gusto”.
El dictador venezolano había afirmado previamente en un acto televisado que Machado “también se fue” del país y que se encontraba disfrutando en una “tasca bien buena allá en un lugar de España”.
Aunque Maduro no mencionó el nombre de la opositora, el ministro de Comunicación, Freddy Ñáñez, recogió estas declaraciones y aseguró en Telegram que, según el líder del régimen chavista, “María Corina Machado huyó del país hacia España”.
“No se lo digan a nadie, se fue del país, me dicen mis fuentes que huyó (…) son cobardes, son buenos para lanzar mensajes de odio e intolerancia, pero se fue, le llegaron las maletas Gucci y se fue”, sostuvo Maduro.
La líder venezolana señaló que el dictador chavista vive en “un universo paralelo rodeado de guardaespaldas” y que “sabe que el pueblo lo derrotó” en las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio.
Según la ex diputada, el verdadero ganador de los comicios fue Edmundo González Urrutia, quien ahora se encuentra exiliado en España tras denunciar la persecución política y judicial que sufrió en Venezuela.
“Edmundo González fue forzado, chantajeado y amenazada su vida y la de los suyos para que saliera del país. Fue una operación muy oscura del régimen de buscaba debilitarlo y dividirnos, pero le salió el tiro por la culata (…) Y yo estoy aquí con los venezolanos, obviamente protegiéndome y cuidándome porque no les voy a dar el gusto de que sepan dónde estoy”, aseguró Machado.
En sus declaraciones, María Corina Machado insistió en que los resultados de las elecciones del pasado 28 de julio representan un “descalabro del chavismo, no solo como un movimiento político, sino también como una estructura de control social”.
La dirigente subrayó que la oposición logró una contundente victoria con el 70% de los votos frente al 30% del dictador Nicolás Maduro, a pesar de las condiciones “absolutamente abusivas, atropelladoras e ilegales” impuestas por el régimen.
Destacó que esta victoria fue producto de la unión de toda Venezuela, e incluso contó con la cooperación de efectivos del Plan República y empleados del Consejo Nacional Electoral (CNE), lo que, según sus palabras, “desmoraliza” al régimen y lo tiene “desesperado”.
La antichavista no solo defendió la legitimidad de los resultados, sino que también presentó pruebas concretas. Según Machado, tienen en su poder “más del 83% de las actas originales, en papel, provenientes de las máquinas del CNE”. Estas actas coinciden con las versiones digitalizadas y con cientos de videos grabados durante el día de las elecciones, lo que, en palabras de la dirigente, constituye “una evidencia demoledora” de que Edmundo González Urrutia es el verdadero presidente electo de Venezuela.
Además, subrayó que cuentan con los acuses de recibo del Plan República y del CNE, que confirman la autenticidad de las actas impresas antes de la transmisión de los resultados.
“Si nosotros tenemos las actas, primero las tenía el Plan República y ellos se las llevaron al CNE”, afirmó Machado, desmintiendo las versiones del régimen que alegaban que el CNE había sido hackeado y que no tuvieron acceso a la información.
Según la ex diputada, el dictador se ha atrincherado en el Alto Mando Militar y se escuda en un sistema represor armado y judicial, además de apoyarse en ingresos del narcotráfico y del tráfico de oro.
“La soberanía popular debe ser respetada”, declaró Machado, añadiendo que la fase actual de la lucha en Venezuela consiste en hacer “cada día más costosa” la permanencia de Maduro en el poder, que solo se mantiene “a la fuerza y a golpes”.
Aseguró que desde las elecciones del 28 de julio, el chavismo “no ha ganado un solo apoyo”, y concluyó que es imperativo aumentar el costo de su permanencia en el poder para precipitar su salida.