
La Administración de Donald Trump podría acceder a un plazo de 60 días para que la petrolera finalice sus trabajos en el país.
Estados Unidos evalúa otorgar a la petrolera Chevron una nueva extensión de su licencia para operar en Venezuela, informó este martes la agencia de noticias Bloomberg, citando a una fuente familiarizada con el asunto.
Precisamente, la Administración de Donald Trump estaría dispuesta a permitir que la compañía continúe con sus trabajos en el país caribeño durante otros 60 días, en tanto continúa negociando con el régimen de Nicolás Maduro un abanico de cuestiones, entre ellas los deportados y la situación de sus connacionales detenidos en Caracas.
Inclusive, este mismo martes, el enviado especial de Trump Richard Grenell viajó a Antigua para reunirse con miembros del chavismo, sumó la fuente, que no precisó, sin embargo, la agenda del encuentro.

Según dijo Trump entonces, se trató de una estrategia para elevar la presión sobre el Palacio de Miraflores e impedir que continuara haciéndose con ingresos millonarios que le permiten mantener su maquinaria de represión y violencia, y perpetrarse en el poder.
La medida alcanzó a otras compañías del rubro, como la francesa Maurel & Prom, la española Repsol y la italiana Eni.
Sin embargo, la fecha fue extendida luego de los contactos de Grenell con el régimen, que incluyeron -inclusive- un viaje a Caracas.
La industria petrolera es uno de los motores principales del país y, con ella, lo es también Chevron, que consiguió hacerse con un permiso para operar, pese a las sanciones internacionales, en sociedad con la estatal Petróleos de Venezuela (PdVsa).
En los últimos años, la empresa aumentó su producción hasta suministrar alrededor del 20% de la producción nacional -unos 200.000 del millón de barriles diarios de crudo-, lo que contribuyó a una inyección de divisas en el sector privado.

Es por ello que, pese a que la Casa Blanca no confirmó la información sobre la posible extensión, los rumores fueron suficientes para hacer que los bonos del país caribeño y de la petrolera estatal subieran, con la esperanza de que no se sientan -por lo menos en el corto plazo- los agudos efectos de la suspensión de las operaciones.
A principios de mayo, Maduro había asegurado que Venezuela preveía mantener la producción en sus bloques petroleros, incluso con los obstáculos de la Administración Trump.
“Los trabajadores tienen las capacidades para que estos campos petroleros sigan produciendo y, además, me decían hoy que no solo (…) van a seguir produciendo, sino que tenemos el plan para crecer en la producción en todos estos campos petroleros”, dijo durante su programa semanal de televisión.
“A Venezuela no la va a detener nadie, a quien le hacen daño es a Chevron. Venezuela va a seguir su camino en el campo petrolero, produciendo y llevando productos venezolanos al mercado internacional que tenemos garantizado, esa es la verdad”, sumó.