«Guayabo zarandiao» es un fenómeno viral en las redes 2.0 y hace de su intérprete una joven promesa
Su voz recia y su presencia en escena están a la altura de las grandes glorias del folklore venezolano. Su interpretación de “Guayabo zarandiao” la consolidó como una promesa de la música criolla y actualmente domina plataformas como Tik Tok e Instagram, mientras que en YouTube cuenta con 2.700.000 visualizaciones en poco más de un año, al tiempo que en Spotify suma cerca de 100 mil oyentes. Su nombre es Emily Galaviz y tiene tan solo 17 años de edad.
Emily ya es un ídolo de la canción venezolana que se prepara para una gira en los Estados Unidos, un hito si se considera su edad y el género que representa, pero sobre todo que es una artista sin apoyo mediático a quien no le ha hecho falta pagar “payola”, pues el éxito radica en su talento y el favoritismo de los consumidores de las plataformas 2.0 que, al fin y al cabo, son los que hacen que un artista se mantenga o quede en el olvido.
Emily Galaviz nació y creció en San Casimiro, estado Aragua, rodeada de la rica tradición musical de la región. Desde temprana edad mostró un talento innato para el canto, los instrumentos musicales y la poesía, influenciada por las melodías de los grandes exponentes de la música llanera.
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Dominación total
La canción “Guayabo zarandiao” se ha convertido en un himno para los amantes de la música llanera. Su letra, llena de nostalgia y pasión, habla del desamor y la añoranza. Emily, con su voz imponente pero cálida y emotiva, logra transmitir la profundidad de esos sentimientos.
No obstante, “Guayabo zarandiao” no solo ha conquistado a los venezolanos, sino que trascendió fronteras. En países vecinos como Colombia y Ecuador, la voz de Galaviz ha llegado a oídos ávidos de autenticidad y pasión. Su estilo fresco y genuino ha ganado seguidores en toda la región, tal como lo demostró recientemente el influencer y conferencista colombo-japonés Yokoi Kenji Díaz, quien compartió con su comunidad de 4 millones de seguidores un extracto del tema y su reacción.
La joven promesa de la música llanera se tomó unos minutos para conversar con Últimas Noticias sobre su carrera. En medio de compromisos profesionales (grababa el que será el videoclip de su próximo tema, que será inédito), aclaró que Yokoi no ha sido el único que reaccionó a su música y brindó detalles sobre qué viene para su futuro.
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—¿Quién es Emily Galaviz?
—Soy una niña de un pueblo llamado San Casimiro (estado Aragua) que ama con locura los animales de granja o domésticoo. Mi mejor momento es mientras canto, cantar es mi momento feliz.
—¿Cuál es tu historia personal y cómo llegaste a la música llanera?
—Llegué a la música llanera gracias a todos esos festivales infantiles del colegio y mi historia personal tiene sus momentos buenos y otros no tanto.
Parte de mi historia personal está plasmada en mi primera canción llamada “Mi triste realidad”, que la puedes conseguir en todas las plataformas.
—¿Qué influencias artísticas han moldeado tu estilo musical?
—Desde niña mi referente es Mayra Tovar y todo su temple. También lo afinado de Armando Martínez y lo sentimental de Jorge Guerrero. Y de Reynaldo Armas, la constancia.
—¿Qué tiene “Guayabo zarandiao” que resonó con Emily Galaviz y por qué decidiste interpretarla? ¿Hay alguna anécdota detrás de ella?
—Como muchos saben, “Guayabo zarandiao” fue grabado hace años por Mayra Tovar. La idea de seleccionar este tema, cambiar toda la guía melódica y el ritmo en ese fragmento de la canción fue de mi mánager, Rafa Show.
En contra de la opinión de los tradicionalistas del folklore, que decían que no hiciéramos eso, ahora es parte de mi sello agarrar temas tradicionales y cambiar un fragmento de la guía melódica. Puedes escuchar la versión original de un tema llamado “Juanita” y luego escuchas mi versión.
—¿Por qué crees que esta canción ha resonado tanto con el público?
—En esta era de la viralidad y la difusión inmediata de las canciones, tiene que ver mucho con Dios y la fe con la que grabamos este proyecto, por apostar a las nuevas ideas y atrevernos a llevarlas a cabo.
—¿Cómo te enteraste de que la canción se volvió viral en las redes sociales?
—Cuando el video en YouTube llegó en menos de tres meses al millón de vistas… y de un día a otro el teléfono comenzó a sonar como loco. Esa fue la mayor señal.
—¿Cuál ha sido tu reacción al ver el alcance que ha tenido “Guayabo Zarandiao”?
—Aún no lo puedo creer. Recuerdo que tres meses antes nada de esto paso nunca por mi mente, yo solo quise cantar y ahora, gracias a Dios, estoy viviendo un sueño.
—¿Has recibido algún tipo de reconocimiento o feedback especial desde que “Guayabo zarandiao” se publicó en la cuenta de Yokoi Yenji?
—Mucho antes de que Yokoi reaccionara también lo hicieron Camilo, Marck Antony, Reynado Armas, Neutro Shorty, Manira… Lo hicieron los hijos de Diomedes y muchísimos otros… Y aún de pana no lo creo.
—¿Qué planes tienes para tu carrera musical? ¿Hay algún nuevo proyecto en camino?
—La internacionalización es nuestra meta como equipo. El proyecto en camino es mi nueva canción inédita, cuyo video estamos rodando mientras te respondo.
—¿Cómo esperas seguir conectando con tus seguidores a través de tu música?
Hoy uno de los pro y los contra es que gracias a las redes sociales la conexión es inmediata. Pero gracias a Dios me llegan muchos mensajes y con ganas de responderlos todos, pero de pana es difícil.