Los Duques de Sussex decidieron borrar del historial de sus pequeños la conexión con la corona.
Desde el año 2020, la pareja conformada por el príncipe Harry de Inglaterra y su esposo, la exactriz Meghan Markle, decidió abandonar los lujos y beneficios que les otorgaba la corona británica para comenzar a vivir una vida fuera de los protocolos en Estados Unidos, por lo que sus relaciones con la familia real han estado muy deterioradas.
Su salida del Palacio de Buckingham, le provocó a Harry que perdiera los cargos que tenía dentro de la realeza, como su puesto siendo Mayor Capitán General de los Royal Marines, el cual ocupaba desde el 2017. Asimismo, para el velorio de su abuela, lució su uniforme militar y solo portó sus medallas. Esto mismo se repitió en la unción de su padre.
Esta situación ha mantenido lejos a los hijos de los Duques de Sussex, Archie y Lilibet, quienes no mantienen ningún contacto físico con la familia de su padre. Ahora, sus padres han decidido cambiar su apellido y desaparecer la conexión con la monarquía de su abuelo, el rey Carlos III.
Anteriormente, el apellido de los pequeños era Mounbatten-Windsor pero por decisión de sus progenitores, se llamarán Archie Sussex y Lilibet Sussex, según una publicación del Daily Star. Esto tiene como objetivo potenciar su marca Sussex dentro de los negocios que planean llevar a cabo. De igual forma, una fuente cercana a la pareja comentó que: «esta elección refleja el hecho de que la familia, desde la coronación del rey, ahora comparte el mismo apellido por primera vez. Representa su unidad y es un momento de orgullo».
Recientemente, lanzaron nuevamente su portal web después de un año de estar inactivo. En él, planean informar sobre todos sus pasos en las negociaciones que tienen hoy en día con los patrocinios, empresas, fundaciones y organizaciones. De igual forma, por las redes sociales se mantienen activos sobre cómo es su vida en USA y han mostrado el crecimiento de sus pequeños.
En la página, el hijo de la princesa Diana se describe de esta manera: “Humanitario, veterano militar, defensor de la salud mental y activista ambiental. Autor más vendido del New York Times de Spare”. Mientras que la estadounidense dice ser una feminista y defensora de los derechos humanos y la equidad de género; también presume que el New York Times la cataloga como una de las principales autoras.