Luego de cinco horas de interrogatorio adelantado por las autoridades colombianas, la aeronave YV3226 despegó para retornar a Venezuela
Las autoridades identificaron a las personas que llegaron a Cúcuta en una aeronave venezolana, con matrícula YV3226 y modelo S550. En un principio, se indicó que el avión aterrizó sin permiso en el territorio nacional, pero la Aeronáutica Civil informó que la aeronave en cuestión sí contaba con autorización operacional.
“Conforme a lo establecido en el Convenio de Chicago y los Reglamentos Aeronáuticos de Colombia vigentes, nos permitimos informar que la aeronave YV3226 cuenta con la debida autorización por parte de la autoridad de aviación civil colombiana, Aerocivil”, se lee el documento enviado a las autoridades del Aeropuerto Internacional Camilo Daza de Cúcuta, que fue compartido por el presidente Gustavo Petro.
Tras la confirmación de las condiciones operacionales de la avioneta, fueron revelados los nombres de cinco personas que viajaban en él. Se trata de los militares activos Danyer Luis Pirela Chorizo y Erick José Ruiz Gonzálesz el piloto Walmberg José Barrios Gómez; el copiloto Javier Alejandro Sánchez Ortíz; y el auxiliar de vuelo Anderson José Aguilar Blanco. Según reportó La FM, los uniformados portaban armas de fuego y ahora están bajo la custodia de la Policía Nacional.
Un fallo en la navegación
En el comunicado, explicó que, de acuerdo con el Convenio de Chicago, si se llega a requerir, una aeronave puede llegar al territorio nacional para hacer escalas técnicas sin ningún problema y que también puede hacer uso de los aeródromos disponibles en caso de que exista una emergencia, lo que se ajusta al caso actual. Al parecer, hubo una “confusión entre pistas cercanas”.
En Colombia, las aeronaves envueltas en este tipo de situaciones pueden permanecer en el territorio hasta por 48 horas y, según el artículo 25 del convenio citado, en ese tiempo se debe brindar la asistencia necesaria a los viajeros, en caso de que se encuentren en riesgo. “Las autoridades pueden proporcionar los medios de asistencia adecuados, permitiendo, incluso, que los propietarios o las autoridades del Estado en que esté matriculada la aeronave proporcionen los medios que la circunstancia demanden, con la debida coordinación”, se lee en la comunicación.
Asimismo, se autorizó el despegue de la avioneta para que continúe su recorrido al destino establecido, teniendo en cuenta que no aterrizó en Colombia sin permiso y que su caso corresponde a una “situación de peligro”.
“Igualmente, estas consideraciones aplican para la tripulación, sus pasajeros, sus pertenencias, y su equipaje, que para efectos de la Aerocivil hacen parte de un incidente ajeno a su voluntad, cuya causa corresponde a un presunto error de navegación”, concluyó la Aeronáutica Civil.
¿Cuál es el destino de la aeronave?
La Embajada de Venezuela se pronunció sobre el aterrizaje de la aeronave en territorio colombiano, explicando que los tripulantes se dirigían a San Antonio de Táchira (Venezuela), pero que, por “razones meteorológicas”, no fue posible que aterrizaran en su destino, sino que tuvieron que ubicar otro punto para llegar a salvo: el Aeropuerto Camilo Daza de Cúcuta.
Precisó que los militares que iba como pasajeros no llevaban sus pasaportes, necesarios para vuelos internacionales, porque su trayecto era nacional. En ese sentido, no se requería dicha documentación.
De regreso a Venezuela
W Radio confirmó que, luego de cinco horas de interrogatorio adelantado por las autoridades colombianas, que llegaron en un vuelo a la terminal aérea, la aeronave YV3226 despegó para retornar a Venezuela.