
El partido de Maurico Macri tiene dudas sobre el compromiso del oficialismo con una agenda común. Por el momento no habrá más encuentros hasta después de las elecciones en CABA.
La relación entre el PRO y La Libertad Avanza está marcada por una dualidad evidente: una afinidad ideológica atravesada por una disputa política por el liderazgo de esa incipiente sociedad. Esto se ve potenciado por las elecciones porteñas del 18 de mayo, donde competirán por separado.
Y este miércoles hubo una muestra explícita de esa dualidad: ambos impulsaban -al menos desde el discurso- el proyecto de Ficha Limpia, que no alcanzó la mayoría absoluta en el Senado y no será ley, al menos este año. Eso generó acusaciones cruzadas y hostilidades varias, todo en medio de intensas negociaciones para sellar un acuerdo electoral en la provincia de Buenos Aires.
“Vamos a esperar a que se calmen un poco las aguas”, señaló a este medio un dirigente de primera línea del PRO. “Esta semana va a ser imposible amortiguar cualquier impacto”, confesó otro armador clave en la provincia.

El malestar en el PRO es indisimulable, en especial en la órbita nacional, con sede porteña. Quien deberá sortear esa tensión es el presidente del partido fundado por Mauricio Macri en la provincia, Cristian Ritondo.
Hasta acá, el también titular del bloque de diputados nacionales del PRO es quien lleva adelante las negociaciones con LLA, en tándem con Diego Santilli y el intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro. En las últimas horas, Ritondo ofició de mediador y escucha de unos y otros enojados por este fracaso de Ficha Limpia.
“Es todo tensión ahora. Te ponen en un escenario para no hablar más”, confió a TN un dirigente libertario con llegada a Nación y buen diálogo con el PRO. Los dirigentes de LLA en la provincia con Sebastián Pareja a la cabeza tendrán la ardua tarea de retomar un diálogo que si bien es fluido en tierras bonaerenses, se corta en la Nación.

Y es que si bien la sensación en ambas fuerzas es que se quemaron todos los puentes, ninguno pierde de vista que el pico de tensión se produce a 10 días de la elección legislativa en la Ciudad de Buenos Aires. Desde un principio, se acordó no avanzar hasta una vez superada esa fecha límite, aunque no menos cierto es que se mantuvieron reuniones y charlas en el territorio.
“Reuniones formales no habrá nada hasta después del 18″, remarcó un dirigente del PRO que trabaja desde hace tiempo por la articulación con LLA. Y bajó los decibeles: “La pirotecnia es solo porque están a una semana de la veda en CABA. Es lógico”.
Y claro, hay expectativa por lo que pueda suceder del otro lado de la General Paz. “El posible triunfo de Santoro va generar presión por llegar a un acuerdo en la provincia”, apuntó otro de los impulsores de un acuerdo con los libertarios.
Enojo y acusaciones cruzadas, a días de las elecciones porteñas
“Me decepciona profundamente lo de la diputada (Silvia) Lospennato mintiendo abiertamente, no estaban los votos“, afirmó el Presidente Javier Milei este jueves en la 11° edición del Latam Economics Forum. Y remarcó: “No estaban los votos, fue toda una operación mediática teñida de amarilla, por eso el jefe de la bancada de LLA pidió que antes se firmara un compromiso”.

Antes, el vocero presidencial, Manuel Adorni había hecho hincapié en que “es insólito que quienes no pudieron aprobar el proyecto en sus 4 años como Gobierno Nacional, ni en sus 17 años como Gobierno de la Ciudad, donde tenían mayoría, nos acusen de querer postergarlo cuando fue el propio Presidente quien lo envió en extraordinarias”.
Lospennato apuntó en conferencia de prensa directamente contra el Presidente: “Después de anoche perdí toda la confianza que le tenía. Tal vez no le importe nada, pero me defraudó“. Y sugirió una maniobra del Gobierno detrás de la caída de Ficha Limpia: “No voy a acusar sin pruebas porque no todos somos iguales en la política y además porque tengo la certeza de que la verdad sale a la luz y el precio de los apoyos parlamentarios se publican en el Boletín Oficial”.